El hombre invisible: Un intento desafortunado
- Araceli Tario
- 28 feb 2020
- 2 Min. de lectura

Cuando se trata de reinventar clásicos de terror por lo general se piensan con escepticismo a pesar de considerarse las originales como “anticuadas” o viejas y en el caso de El hombre invisible, este ha sido uno de los personajes que más transformaciones ha tenido para las adaptaciones de cine, empezando por el clásico en blanco y negro de The invisible man (1933) dirigida por James Whale, pasando por la comedia romántica Memoirs of an invisible man (1992) de John Carpenter hasta la más moderna Hollow man (2000) dirigida por Paul Verhoeven por mencionar las más conocidas; sin embargo, cuando Universal anunció el re lanzamiento del Dark Universe con The Mummy en 2017 se creyó que por fin todos los “Monstruos” de Universal tendrían una nueva oportunidad de regresar a pantalla grande y en esta ocasión de poder vincular todas las películas; no obstante, el “fracaso” en taquilla para la primera al ser lanzada, obligó a la productora a modificar este objetivo, reduciéndolo a diversas películas individuales y por personaje de donde Leigh Whannell parte para su más reciente película.
Con una idea interesante aunque predecible, en esta ocasión, El hombre invisible gira en torno a Cecilia (una aplanada Elisabeth Moss), una mujer quien después de terminar una relación controladora y agresiva no puede librarse por completo de la misma, pues aun en la ausencia de su expareja, percibe que sigue presente. Algo muy inteligente de este largometraje es el haberlo actualizado a la modernidad y darle un enfoque humano, centrándose en las relaciones afectivas, dándole un tono más realista al mismo tiempo que mezcla el misterio y la ciencia ficción.


A pesar del ingenio en dirección (el uso de motion capture y movimientos de cámara inusuales) y la creatividad en la historia de Whannell, termina por ser un proyecto desafortunado con una clara influencia del estudio y productora por hacer una película innecesariamente larga cuando pudo haber sido más concisa y más impactante si durara menos; sin embargo, los momentos de tensión y acción son igualmente de impresionantes como en el anterior proyecto de Whannel: Upgrade (2018) que aunque no resulte tan innovador para el público que ya conoce esta película, sigue siendo algo agradable de ver.


The invisible man, es un recuento de la posibilidad del origen de este mítico personaje, dándole una realidad de inicio que aunque tiene actuaciones medianas y una duración excedida logra entretener ligeramente si no se tiene algo en específico que ver.