Amor fraternal
- Araceli Tario
- 12 sept 2017
- 1 Min. de lectura

¿Hay algo más entrañable que la familia? Cédric Klapisch lo explora en El viñedo que nos une (Ce qui nous lie, 2017) que cuenta la historia de tres hermanos que se reúnen después de 10 años al heredar el viñedo de su padre, lo cual no solo removerá recuerdos sino también sus vidas actuales.
Una película sencilla que en ocasiones le falta fuerza en su drama pero sin perder el objetivo de remarcar los valores familiares, el disfrute y la responsabilidad de vida, además de la nostalgia de la infancia y el amor entre hermanos.
Con locaciones espectaculares marcando el paso del tiempo con el cambio del viñedo a lo largo de las estaciones para reforzar la analogía de la vida con un buen vino, que se obtiene con paciencia y amor. Las actuaciones son promedio y se ayudan de diálogos carismáticos y algunos gags divertidos para hacer más ligero el drama acompañado de un soundtrack diverso (cultural principalmente) que es idealmente asociado a momentos y reflejando la influencia de lo occidental en Francia.
El viñedo que nos une es un largometraje para la familia y al público adulto que le agraden las historias familiares y de la vida cotidiana con un toque de nostalgia y motivacional.