Gran Turismo: Entretenimiento de verano
Las historias de superación y logro tienen el objetivo de inspirar y más si se basan en una historia de la vida real como Gran Turismo (2023) de Neill Blomkamp, una película que no solo cumple con ello, sino con el entretenimiento cinematográfico ideal del verano pero, ¿ser espectacular es suficiente para ser trascendental?.
Esta peli se centra en la vida de Jann (un aplanado y poco versátil Archie Madekwe) un joven recién graduado de la preparatoria que no ha encontrado su vocación profesional; sin embargo, en el mundo del videojuego se encuentra con la oportunidad de ingresar a una academia en la que ofrecen a los mejores jugadores de Gran Turismo de convertirse en un corredor profesional de autos deportivos.
Al no ser la primera película que aborda una historia en el mundo de las carreras es evidente que para esta producción sirvieron de inspiración películas como Rush (2016) de Ron Howard o Ford vs Ferrari (2019) de James Mangold mezclándolo con el estilo audiovisual de la experiencia de un videojuego; sin embargo, la falta de profundidad propia de la historia no permite tener una empatía mas allá de la emoción que pueden generar las espectaculares secuencias de acción filmadas en IMAX que para el público menos exigente o más inexperto, le será suficiente, pues es una historia de superación que por lo general emociona por el simple hecho que implica vencer un reto en la que se tienen que sortear adversidades en contra de pronósticos.
Las actuaciones que sobresalen son las de Orlando Bloom (como el ambicioso pero visionario Danny Moore) y David Harbour (como el incrédulo pero perseverante Jack Salter) quienes interpretan a personalidades opuestas pero complementarias en este mundo de las carreras profesionales haciendo verosímil el contexto social en el que se desenvuelven los corredores de auto. De los aspectos técnicos a destacar se encuentra la edición a cargo de Austyn Daines, Colby Parjer Jr. y Eric Freidenberg quienes en conjunto con la fotografía de Jack Jouffret, se lucen por contar con un ritmo excitante e impresionante a través de ángulos y encuadres que juegan con la perspectiva de primera persona así como la ilusión del movimiento al ver los autos o manejar que con un dron o cámara aérea se pueden captar con zoom ins y zoom outs que atraen hasta el público menos interesado en este mundo. Completando la experiencia, esta la música/score compuesta por Lorne Balfe y Andrew Kawczynski quienes con sonidos principalmente electrónicos nos dan el tono característico de un videojuego pero fusionándose al de una película de acción al incluir instrumentos de cuerda y coros que aunque a veces se escucha poco original y genérico o como música para avance de película, aportan emotividad y un estilo principalmente a los momentos más significativos de esta historia.
Gran Turismo es una película para público que gusta de películas entretenidas de narrativa sencilla y lineares que motivan o emocionan haciendo olvidar que solo se observa una pantalla dejando la sensación que los retos solo son difíciles de alcanzar pero no imposibles.
Boletómetro: 3 de 5 Boletitos