Alma perdida

Pareciera que las animaciones de Disney Pixar son garantía de ser una experiencia cinematográfica memorable por su legado y vanguardia en desarrollo tecnológico que ha demostrado desde su primer largometraje Toy Story (1995); sin embargo, con su último largometraje: Soul (2020) co-dirigida por Pete Docter y Kemp Powers (lanzado como estreno exclusivo en la plataforma Disney+ por motivos del confinamiento pandémico) demuestra que este estudio de animación que destacaba por su autenticidad y creatividad se encuentra ahora en una zona de confort, repitiendo una fórmula y hasta tristemente, plagiando historias ya más que conocidas.

Esta animación cuenta la historia de Joe, un hombre adulto quien tiene la oportunidad que tanto anhelaba para desempeñarse como músico en una banda de jazz; sin embargo, un accidente lo lleva a revalorar esta búsqueda por la realización profesional.

Soul es un intento por acercar al público a reflexionar acerca de temas más complejos como los de consciencia, vida y muerte; sin embargo, aunque su propuesta es ambiciosa y llamativa para el público adulto, estos son vulgarizados para que un público más infantil pueda tener un rato de entretenimiento con un poco de “enseñanza"; sin embargo, la falta de enfoque no se debe a que los temas sean difíciles de abordar; sino el de abarcar más de lo que fueron capaces de comprender los creadores, mostrando irresponsabilidad al minimizar temas tan importantes para la formación humana como ya lo hicieron previamente en Inside Out (Intensamente) en el 2015.

A pesar que en contenido no muestran el nivel de anteriores proyectos, es destacable el desarrollo de nuevas técnicas para el “Más allá” y el "Gran Antes"; sin embargo, esto no es tan sorprendente si recordamos lo que en 1982 Disney logró desarrollar en condiciones más precarias y prácticas con la trascendental Tron de Steven Lisberger lo que hace pensar si realmente Soul vino a revolucionar algo en la animación contemporánea.

Alma o Soul es una película animada para público que busca entretenerse una tarde sin necesidad de profundizar en los mismos temas que propone la película.

Boletómetro: ½ boletito