Trágica adicción

¿Será que la perspectiva materna es más emotiva que la de un padre? Pareciera que este es el pensamiento de Peter Hedges al haber escrito y dirigido Regresa a mi (2018) que curiosamente no muy lejos de su estreno se encuentra Beautiful Boy (2018) que lidia con el mismo tema pero desde la perspectiva de un padre.

Esta historia se centra en la relación entre Ben (un convincente Lucas Hedges) y su mamá (una sobria pero adecuada Julia Roberts) cuando éste regresa a casa posterior a estar internado por un tiempo en rehabilitación; sin embargo, su dependencia a opiáceos pondrá a prueba el amor que tiene una madre por su hijo.

Situada en la gélida Nueva York, esta historia escrita por el mismo Peter Hedges explora las dificultades de un joven que lucha en contra de su dependencia y las ganas por ser la persona quien su mamá quiere que sea. Esta historia es clara en cuanto al personaje principal que carece de una necesidad económica o emocional, ya que Ben es un joven que pareciera que al no ser blanco de dificultades y encontrarse en un ambiente estable lo mantuvieran en un especie de ocio y desarrollar un desorden por sustancias inexplicable en cuanto a una motivación o relación concreta.

Este largometraje es un melodrama de la relación madre-hijo atormentada por sus dificultades y que no requiere de aspectos técnicos espectaculares; sin embargo, algo que la destaca son las locaciones que de manera indirecta refuerza el alejamiento o fragmentación entre Ben y su madre, lo cual es reforzado por la fotografía de Stuart Dryburgh quien a pesar de hacer uso frecuente de los colores fríos embellece melancólicamente cada momento con una textura propia de esta trágica historia y con uso de encuadres y ángulos sencillos que dan congruencia a toda la composición cinematográfica.

Ben is back o Regresa a mi, es para público que les agraden historias melodramáticas retratadas sobriamente con actuaciones emotivas y humanas.

Boletómetro: Medio boletito